El seguimiento de obras con drones permite monitorear el avance real del proyecto en tiempo récord, con imágenes y datos precisos que mejoran la toma de decisiones, reducen desvíos y aumentan la transparencia para todos los involucrados.
En una obra, el tiempo es sumamente crucial. Los imprevistos, las demoras o los errores de ejecución pueden impactar directamente en los costos finales y en la relación con los clientes. Por eso, cada vez más empresas incorporan drones como una herramienta estratégica para hacer seguimientos periódicos del avance de obra, generando registros visuales, modelos 3D y ortofotos de alta resolución que permiten comparar lo planificado con lo realmente ejecutado. En este artículo te mostramos cómo funciona este servicio, qué beneficios ofrece y por qué es una solución clave para obras de cualquier escala.
¿Cómo funciona el seguimiento con drones?
Mediante vuelos programados (semanales, quincenales o mensuales), el dron recorre la obra siguiendo la misma ruta y capturando imágenes aéreas desde distintos ángulos. Esas imágenes luego se procesan para generar:
Ortomosaicos actualizados del sitio de obra.
Modelos 3D del terreno, estructuras o avances.
Timelapse visuales con el progreso del proyecto.
Mediciones de volumen, distancia o superficie.
Comparaciones visuales entre distintas fechas.
Todo este material puede compartirse con equipos técnicos, directores de obra, inversores o clientes finales.
Visualizar el estado real de la obra desde el aire permite detectar desvíos, retrasos o errores a tiempo, antes de que generen costos mayores.
Los modelos y ortofotos pueden compartirse fácilmente con todas las partes interesadas, mejorando la coordinación, la planificación y la transparencia.
Evita desplazamientos innecesarios al sitio de obra. La información llega directamente a tu escritorio en formato visual y listo para analizar.
Generá un registro visual y técnico de cada etapa de la obra. Útil para certificaciones, auditorías o presentaciones institucionales.
Edificios en altura y obras civiles.
Barrios privados y loteos.
Naves industriales y galpones.
Centros logísticos o comerciales.
Infraestructura pública (calles, puentes, redes).
Tanto en etapas iniciales como en plena ejecución, el seguimiento aéreo se adapta a todo tipo de proyecto.
El seguimiento de obras con drones no es solo una herramienta visual: es una forma inteligente de mejorar la gestión, reducir errores y mantener el control absoluto del proyecto desde el primer día hasta la entrega final.
En Datafield, ofrecemos soluciones de monitoreo adaptadas a cada cliente, con entregables personalizados y reportes claros que se integran fácilmente a tu flujo de trabajo.
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